7 aliados del cerebro que mejoran el rendimiento intelectual

Mejorar el rendimiento intelectual o aumentar la capacidad de concentración y comprensión son solo algunos de los objetivos de muchas personas. Para los estudiantes, preocupados por sus notas; para los adultos, que empiezan a sentir un descenso en sus facultades mentales; o, para niños y ancianos. Todos sabemos de la importancia de la salud de nuestro cerebro como parte de una vida saludable.

Para conseguir estos objetivos, te presentamos a los 7 aliados del cerebro. Conócelos y hazlos formar parte de tu vida:

1. Ácidos grasos Omega 3

Diversas investigaciones han comprobado la capacidad del Omega 3 en la mejora de las funciones cognitivas. Estos ácidos son polisaturados. Sus moléculas se usan en el cerebro para construir membranas celulares y, por eso, es lógico que la salud del cerebro depende del acceso que le demos a este tipo de nutrientes en las cantidades necesarias. Los ácidos grasos Omega 3 se pueden encontrar en nueces, tofu, semillas de lino, soja, sardinas, camarones, coliflores, salmón o calabaza, aunque también se pueden consumir mediante suplementos alimenticios.

2. Triptófano

Este aminoácido es esencial, lo que quiere decir que solo lo podemos obtener a través de la alimentación. Su importancia reside en su capacidad de promover la liberación de la serotonina, un neurotransmisor que se relaciona con el sueño, el placer y el estado de ánimo. El triptófano abunda en huevos, leche, cereales integrales, avena, semillas de sésamo, pipas de calabaza, cacahuetes, dátiles, espirulina, calabazas, etc. Este aminoácido es básico para personas que viven en entornos que les someten a altos niveles de estrés, aunque debes saber que, para poder ser metabolizado correctamente, se requiere tener un nivel adecuado de vitamina B6 y magnesio.

3. Glutamina

También la glutamina es un aminoácido, pero este, en cambio, se produce en el propio cuerpo. La glutamina es el aminoácido de mayor concentración en el líquido cerebral y tiene una gran participación en nuestro organismo. El déficit de ácido glutámico produce problemas de fatiga o bajo rendimiento mental. Esto es así porque la glutamina aumenta la producción del ácido gamma aminobutírico, el neurotransmisor inhibitorio más importante del cerebro, que actúa como tranquilizante y favorece la concentración natural. Es natural que el cuerpo, cuando tiene más estrés físico y mental, demande glutamina. Sin embargo, con el paso del tiempo, producimos menos y puede ser necesario ayudar al organismo desde fuera.

4. Kalium Phosphoricum

El fosfato de potasio es una sal presente en células nerviosas, sanguíneas y cerebrales. Su carencia provoca, entre otros problemas, depresión mental, pérdida de memoria y trastornos nerviosos. Es especialmente importante en el mantenimiento del cerebro y procesos vitales como la transformación de grasas en ácidos grasos que se puedan asimilar. El consumo externo de esta sal puede ser un gran remedio en momentos de temor, intranquilidad o problemas del sueño.

5. Vitaminas B

Muchas de las vitaminas del grupo B son importantes para el cerebro, ya que regulan compuestos cerebrales como la serotonina, epinefrina y dopamina. Una de ellas es la vitamina B6, esencial para el desarrollo cognitivo, pues colabora en la absorción de la B12. Por su parte, la vitamina B12, es imprescindible para la síntesis de los neurotransmisores y participa en la elaboración de las células. Estas vitaminas las encontrarás en alimentos de origen animal, como carnes, lácteos o huevos, y en suplementos alimenticios.

6. Ginkgo

Es uno de los árboles más antiguos del planeta, cuyas hojas poseen dos tipos de antioxidantes: los flavonoides y terpenoides. La OMS ha declarado que el ginkgo sirve para el tratamiento de la insuficiencia vascular y diversos estudios han comprobado que su consumo favorece la memoria y concentración. También se emplea para el tratamiento de enfermedades como la demencia senil y el Alzheimer. Esto es así porque protege las células nerviosas que se ven dañadas con estos males. El ginkgo mejora la lucidez mental, el rendimiento intelectual y la circulación sanguínea.

7. Lecitina

En nuestro cerebro existen 100.000 millones de neuronas y otro billón de células de apoyo que se conectan gracias a los neurotransmisores. El aprendizaje y mundo emocional de todos nosotros se relaciona con la actividad de estos neurotransmisores, uno de los cuales se llama acetylcolina y tiene una labor importantísima. La lecitina es la mayor fuente de colina, necesaria para la síntesis de acetylcolina, una de las encargadas del funcionamiento cerebral adecuado y de evitar las pérdidas de memoria, comunes en personas que superan los cuarenta años.

Entender el funcionamiento de nuestro cerebro no es tarea fácil, pero los avances científicos nos acercan cada vez más a la verdad y comprensión. Aplicar este conocimiento a nuestra vida diaria y la mejora de nuestra forma de alimentación sana puede ser una excelente manera de mejorar el rendimiento de nuestro cerebro y evitar problemas futuros, así como de ralentizar el avance de ciertas enfermedades relacionadas con el deterioro cerebral.

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