7 alimentos probióticos que ayudan al aparato digestivo

Son muchas las personas que sufren trastornos digestivos. Las prisas al comer, el estrés, respirar de forma incorrecta y, sobre todo, la elección inadecuada de los alimentos provocan con frecuencia flatulencias, ardores y otros problemas relacionados con la digestión. Si quieres gozar de buena salud, es imprescindible llevar una alimentación sana y una vida saludable. Los alimentos probióticos son bacterias que favorecen la producción de jugos gástricos y enzimas naturales, que son necesarios para el proceso digestivo.

A continuación, una lista con 7 alimentos probióticos que ayudan al aparato digestivo.

1. Tempe de soja

De grandes propiedades probióticas, el tempe de soja se extrae del grano de soja, a través de la fermentación. Se considera, además, como uno de los mejores alimentos sustitutivos de la carne. Sobre todo, para las personas a las que no les gusta el tofu. Es muy versátil en la cocina, ya que puedes prepararlo al natural en una ensalada, al horno o salteado. Además, contiene altas dosis de vitamina B12. Posee más de un 19 % de proteínas y tan solo 7,5 % de grasa. También tiene agentes naturales antibacterianos, por lo que se considera, incluso, un alimento terapeútico.

2. Kéfir

Se obtiene fermentando leche de cabra. Tiene muchos lactobacilus y bacterias bífidus. Posee gran cantidad de vitaminas, minerales y aminoácidos. Protege y regula el sistema digestivo, ya que contiene lactobacilus, leuconostococos, la ctococos y acetobacterias. También contiene levaduras fermentadoras y no fermentadoras de la lactosa. Son bacterias distintas a las del yogur, aunque altamente beneficiosas y protectoras del sistema digestivo. Podemos encontrar de dos variedades: de leche y agua.

3. Ciruela umeboshi

Esta especie de albaricoque forma parte de la medicina en países como China, Corea y Japón. Su nombre hace referencia a la ciruela deshidratada. Estas ciruelas se secan al sol sobre esterillas de arroz, se exponen a las gotas de rocío y, posteriormente, se secan de nuevo al sol. Eso provoca que la ciruelas se achiquen. Luego, se ponen en un barril con sal. El resultado es una fruta con muy alto contenido en calcio, hierro y fósforo, además de en proteínas, mineral es, grasas y ácidos orgánicos. Entre otras virtudes, es desintoxicante, favorece el equilibrio alcalino, mejora la salud del hígado y los intestinos y previene la fatiga y el envejecimiento. Combate la acidez de estómago.

4. Yogur

Es uno de los alimentos probióticos estrella, pero, para obtener sus beneficios, es necesario que haya sido elaborado artesanalmente. Además, debe llevar leche de cabra y contener elementos probióticos, como el lactobacillus acidophilus. Por otro lado, no deben llevar exceso de fructosa, edulcorantes o sustancias artificiales. Dicho esto, entendemos que no cualquier yogur tiene efectos probióticos de por sí. Estas bacterias buenas forman una barrera de protección en el intestino y favorecen la digestión y los movimientos gástricos. Como resultado final, refuerzan el sistema inmunitario.

1. Pan biológico

Si comer pan integral es bueno para la salud, mucho más lo es consumir pan biológico. Y es que está elaborado con auténtica levadura, a diferencia de otros panes, que contienen una sustancia llamada ácido fítico, la cual impide la absorción de nutrientes como el calcio, magnesio o hierro. La levadura madre, sin embargo, neutraliza este ácido fítico. Además, el pan resultante es rico en hidratos de carbono complejos, como el almidón; bajo en grasas; y rico en proteínas y vitaminas del grupo B (B1, B2, B6 y niacina), así como en minerales. También tiene mucha fibra, que beneficia al tránsito intestinal.

6. Col fermentada

Más conocida conocida “chucrut”, la col fermentada es, junto con el kéfir y yogur, uno de los alimentos probióticos más conocidos. Es el resultado de la fermentación del repollo o de la col blanca. Y es que tiene bacterias lácticas ( lactobacillus y bifidobacterium), que, con la fermentación, hacen proliferar los microorganismos beneficiosos para la flora intestinal. Mejoran la absorción de los nutrientes y la digestión. Además, regula el pH del intestino. Es perfecta para combatir los gases. Pero, además, es depurativa; tiene vitaminas A, B1, B2 y C; y minerales como el hierro, calcio, fósforo y magnesio. Refuerza el sistema inmunitario, mejora el estado de la piel y mucosas y ayuda a combatir la s alergias.

7. Miso

Es uno de los ingredientes reyes de la cocina macrobiótica. Su protagonismo se debe a su versatilidad, pero, sobre todo, a sus propiedades probióticas. La popular sopa de miso es muy rica en lactobacillus y bífidus. Pero los beneficios del miso van mucho más allá, puesto que ya se empleaba ancestralmente en Japón como alimento protector frente a los agentes patógenos. Así, se dice del miso que neutraliza los efectos de la contaminación ambiental y minimiza las secuelas del cáncer en el organismo gracias a su efecto alcalino.

Consumir de manera habitual estos 7 alimentos probióticos mejora tu salud, pues todos ellos resultan muy digestivos y nutritivos y refuerzan las defensas naturales del organismo. Además, te aportan vitaminas y minerales esenciales en mayor cantidad que otros alimentos.

Imágenes: Ollyy, Arif Relano Oba, DUSAN ZIDAR, Sakarin Sawasdinaka, mama_mia, Irina Fischer, BGSmith, AS Food studio